Cuando medio planeta aún solloza por el fin de sus vacaciones navideñas, la otra mitad justo acaba de quemar los últimos cartuchos de alegría y diversión en lo que se conoce como una de las festividades más coloridas y ruidosas del mundo mundial!!!
Hablamos de la mítica Fiesta de la Primavera China (aka Año Nuevo Chino) cuya tradición celebra la victoria de un pequeño pueblito sobre el temible y despiadado monstruo Nian... Pero ¿qué tendrá que ver el malvado Sr.Nian con los conejos, el Año Nuevo y el abundante color rojo? Si queréis saber la respuesta preparaos un sabroso té y poneros cómodos ¡que empezamos!
Primer misterio: Mientras Occidente celebra el 2011 sintiéndose el colmo de la modernidad, Oriente va por el año 4709... ¿pero el mundo no terminaba en 2012 O.O? Pues parece ser que "nop", así que volvamos al tema y tratemos de averiguar porqué existe semejante descuadre de años entre Oriente y Occidente.
La respuesta es que ambas culturas miden el tiempo de forma diferente:Occidente usa el matemático calendario gregoriano y Oriente el tradicional calendario lunisolar, cuyo "1er día del año" se calcula con las fases de la luna, por lo que suele ser variable.
De ahí que la Fiesta de la Primavera no tenga un día "fijo" en el calendario y que también se la conozca con el sobrenombre de "Año Nuevo Chino", al coincidir con el 1er día del año del calendario lunisolar.
Segundo misterio: ¿dónde quedan los conejos en todo este asunto?
Pues el origen del conejo y sus amigos es algo "turbio" ya que existen múltiples leyendas al respecto. Pero os contaré una que me pareció especialmente curiosa y dice así:
Antes de subir al cielo, Buda quiso dar una gran fiesta para compartir su sabiduría con todos los animales de la Tierra.
Sin embargo, al final sólo acudieron 12 (rata, buey, tigre, conejo, dragón, serpiente, caballo, cabra, mono, gallo, perro y cerdo) y Buda recompensó su lealtad convirtiéndolos en los 12 signos del zodíaco chino, concediéndoles 1 año de gobierno a cada uno y dándoles poder para influir y marcar el carácter de las personas nacidas durante su reinado.
El gato también quería asistir al convite, pero la rata le engañó diciéndole que la fiesta era al día siguiente... y llegó demasiado tarde ¡De ahí la eterna enemistad entre gatos y ratas!
Último misterio: ¿Y el Sr.Nian?
Resulta que durante el Año Nuevo Chino hay que reunir a la familia, detonar miles de petardos y decorar las casas con motivos de color rojo ¡¡Y todo se debe al ultramalísimo Nian!! Un feroz monstruo de las profundidades marinas que, en nochevieja, tenía la fea costumbre de salir del mar y comerse a todo ser viviente ¡con ropa y todo! destruyendo y machacando lo que le saliera al paso.... vamos ¡un encanto!
Así pues, cuando Nian salía de paseo, la gente escondía cosechas y ganado, echaban el cerrojo a sus hogares y corrían a refugiarse en los bosques para no ser devorados.
Sin embargo, una víspera de Año Nuevo llegó al pueblo un exhausto mendigo. Pidió cobijo a los aldeanos pero estaban demasiado ocupados con la huida, así que nadie le prestó demasiada atención... Todos, excepto una ancianita que le ofreció comida, le advirtió del peligro y le rogó que huyera con ella a las montañas.
Con todo, el mendigo prefirió permanecer en la cada e invitó a la yayita a quedarse con él bajo la promesa de protegerla de Nian. Ella dudó, rehusó y finalmente se marchó dejando al mendigo solo.
Ya entrada la medianoche apareció Nian, con un hambre de lobo y dispuesto a derribar el pueblo entero. Pero al llegar a la casita de la anciana se encontró con una gran estela roja ondeando en la puerta, un centenar de farolillos iluminaban las ventanas, extrañas luces estallaban en el cielo y, por si fuera poco, del patio trasero surgían las tremendas carcajadas del mendigo quien bailaba y hacía estallar petardos provocando un ruido ensordecedor.
Desconcertado ante semejante espectáculo, Nian se asustó tanto que corrió a zambullirse al mar y no regresó nunca nunca nunca más!!
De ahí que en China aún se siga la tradición de engalanar las casas con motivos rojos, se cuelguen estelas con deseos en las puertas, se reúna a las familias para celebrar la gran victoria y se hagan estrellar kilos y kilos de pólvora ¡¡por si Nian decidiera asomar la cabeza n.n!!
En fin, gracias a los sufridos lectores que hayan tenido la paciencia de leerme hasta el final n.n ¡¡Feliz año del conejo a todos!!